Los Óscar al desnudo

 

 Se avecina esta noche la ceremonia de los Óscar, a la que ceremoniosamente llamamos “ceremonia”, mientras que llamamos “gala” a la velada de los Goya. Son sinónimos, claro. De hecho, por definición, una “gala” es una fiesta a la que es obligado asistir ataviado con ropa de gala. En el caso de los varones, un esmoquin o un traje de etiqueta con pajarita negra. En el caso de las señoras, los límites están más difusos. Por ejemplo, Bianca Censori, la mujer del cantante Kanye West, ha tomado la costumbre de asistir a las galas vestida como el emperador del cuento de Ándersen. Lo que se ahorre en tela supongo que se lo paga al diseñador ingenioso que la viste sin vestirla. Al emperador del Ándersen lo delataba un niño, el único que se atrevía a decir lo que todos veían y callaban. Como los tiempos han cambiado y la especie humana ha recaído en una niñez perpetua, a Censori la han señalado absolutamente todos los que la han visto y podían decirlo en voz alta. Pero seguro que las actrices favoritas desfilarán esta noche por la alfombra roja y posarán ante el fotocol con despampanantes vestidos, prestados por los mejores diseñadores, con las sonrisas intactas, antes de que la decepción las marchite. En este arte de descomponer la sonrisa, las que llegarán más entrenadas son Demi Moore y Margaret Qualley, las protagonistas de La sustancia. Imposible que superen su derramamiento en el filme, que solo optará a cuatro estatuillas. No les anda a la zaga Cynthia Erivo, la verdosa protagonista de Wicked, película con diez candidaturas que me ha demostrado que no entiendo de cine porque no pude soportarla y me salí a medio. El jueves lardero, entre echar cuatro horas en una sala oscura o comerme la mona al sol de este veranillo inquietante de febrero, he optado por la mona, que estaba brutal. Pero es indudable que la sonrisa más resistente de estos Óscar la lucirá la española Karla Sofía Gascón, imborrable en la película Emilia Pérez, que al final estará en la ceremonia. Cuando ellos y ellas desfilen y posen, yo estaré posando en otra parte con mi pijama de gala.