El domingo estuvimos con Llanos Campos viendo la película que han filmado con su pirata Barracuda.
En realidad, se trata de una adaptación bastante libre, yo diría que libérrima. Carmen ha consagrado su vida al teatro en su propia Compañía Falsaria de Indias, con obras de gran recorrido como El ojo de la aguja, en la que retrataba el acoso escolar como caldo de cultivo para la violencia. Siempre ha escrito los textos de sus propios montajes. En este en concreto, necesitaba fragmentos de varias historias de género, una de ellas de piratas, así que se los inventó. El del capitán Barracuda la dejó tan satisfecha que lo amplió, completando El tesoro de Barracuda, la historia de un capitán pirata que encuentra un tesoro que resulta ser un libro. Tanto como el propio Barracuda, el hallazgo es Chispas el grumete, que cuenta las historias. Los acompañan otros personajes entrañables como el cocinero Ballena. En 2014, acosada por el austericidio de Rajoy, a punto de echar el cierre a su Compañía, Llanos envió el relato a El Barco de Vapor y le dieron el premio. Desde entonces ha vendido más de 160 000 ejemplares de este libro y de los otros dos de la saga, Barracuda en el fin del mundo y Barracuda, el rey muerto de Tortuga, que han sido traducidos a un montón de idiomas. Luego ha seguido escribiendo y dirigiendo teatro como había hecho desde que, recién alcanzada la mayoría de edad, decidió emanciparse y vivir de la farándula. Una decisión que la abocó a deslizarse por épocas felices y a salvar momentos delicados, hasta que vino Barracuda a rescatarla. Su éxito mundial no ha pasado desapercibido entre nosotros y en 2023 pregonó la Feria de Albacete a propuesta de Izquierda Unida. Ahora, el cineasta Adrià García, con un Goya a sus espaldas, ha llevado a Barracuda a las pantallas. La película seguro que gustará a los niños, pero tiene poco que ver con las historias de Llanos, que son más originales, más audaces y hablan de verdad de libros, que aquí quedan en un segundo plano. Aunque Llanos el domingo no pareció darse cuenta. Estaba feliz y nosotros también de verla.
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